jueves, junio 26, 2008

Los aplausos de Stalin

Dándole vueltas a miembras e inferiorizadas, recuerdo un episodio que leí en Archipiélago Gulag, el más que opinado libro de Solzenitzin. En uno de los primeros capítulos, el autor se encarga de enumerar una serie de "causas" por las que la gente podía ir a parar a uno de los campos de trabajo. Entre muchas, me llamó la atención el relato de una reunión del partido comunista a nivel local, comenzaron una serie de discursos laudatorios, no podía ser de otra manera, a la figura de Stalin, cada que se pronunciaba su nombre el auditorio domesticado prorrumpía en aplausos, la situación llegó a tal encono, que en determinado momento, el aplauso agarró un ritmo inusitado y con pocos visos de interrumpirse, las miradas comenzaron a cruzarse furtivamente, afirma el autor que a vigilarse, ¿quién iba a ser el primer valiente que dejara de aplaudir? El que lo hizo, al día siguiente fue detenido y conducido a unos de esos campos.

No sé por qué la memoria me plantea estas relaciones.

2 comentarios:

P dijo...

Dear,

I'm collecting numbers from various languages.

I politely ask you send me numbers from 1-10 in your language.

Thank you.Än tilt wofeni woka
weq arälemba hesta
hellasano sellä hest
demoka rwiqelso än.

Joselu dijo...

Tras dos meses de desconexión de la blogosfer, retomo mi actividad y en seguido he tenido curiosidad por degustar tus pequeños textos. Me he encontrado con éste. Curiosamente, el escritor ruso ha fallecido este verano o sea que tu reflexión no puede ser más oportuna y atinada. Leí de Solzenitzin -hace más de veinte años- El primer círculo también ambientado en la etapa de represión estalinista. Desgraciadamente el libro desapareció de mi biblioteca y lo recuerdo poco. Un cordial saludo, amigo.