domingo, marzo 03, 2013

En busca del tiempo perdido (II)

Leer un clásico puede resultar una experiencia a destiempo, siempre quedará ese rescoldo de impotencia y duda al reflexionar: ¿qué habría sido de mí con veinte años y este libro en mis manos? puede que flagelarse con esos resquicios del pasado no sea más que justificar ciertas vías muertas o, al menos, estancadas.

¿Qué habrá hoy de aquellas sinapsis que parecen eternas?

No hay comentarios: